Análisis de Riesgos Penales

Prevención de Delitos

La “columna vertebral” de un Sistema de Prevención de Delitos es el Análisis de los Riesgos Penales de la organización, ya que en base a estos riesgos se diseñarán las políticas, procedimientos y normas que integran el Programa de Prevención de Delitos. Cuando los profesionales de cumplimiento normativo comenzamos a desarrollar un Sistema de Prevención de Delitos en una organización lo que pretendemos es crear es una estructura que posibilite que no se produzcan delitos en el seno de la organización (prevención), que en caso de producirse sean detectados a la mayor celeridad (detección) y que el riesgo materializado y detectado sea objeto de medidas de mitigación o reducción (reacción).

El Sistema de Prevención de Delitos, como cualquier Sistema de Cumplimiento Normativo, es un Sistema de Gestión de Riesgos, siendo en este caso un Sistema de Gestión de Riesgos Penales. Para gestionar este riesgo debemos hacer un previo Análisis de Riesgos Penales, del que deben derivar resultados consistentes, válidos y comparables, porque en caso contrario el sistema creado no será eficaz. A título de ejemplo, si el riesgo inherente de delitos contra el medio ambiente (sin tener en cuenta las medidas implantadas) en una empresa del sector metalmecánico (recubrimientos mecánicos y mecanizado) resulta ser bajo, algo nos está diciendo que no hemos desarrollado bien el Análisis de Riesgos o que la metodología empleada no es la correcta. Por tanto, podemos emplear la metodología que consideremos, pero debe ser una metodología con resultados lógicos y consistentes. De forma muy sintética, ya que el proceso en la práctica es bastante más complejo, el Análisis de Riesgos podría estar estructurado en las siguientes fases:

1. Creación de un Mapa de Riesgos por Departamento. Ejemplo:

RIESGO PENAL

PROCESO

ESCENARIOS

Delitos contra el Medio Ambiente

Sostenibilidad y Medio Ambiente

En este apartado estableceríamos todos los posibles escenarios que podrían dar lugar a la comisión de este delito basándose en la propia idiosincrasia de la empresa.

 


2. Calcular el impacto que podría causar en la organización la materialización del riesgo (comisión del delito) de acuerdo con una escala y según criterios definidos por el profesional que desarrolle la metodología.

Gravedad

Criterios

Tramo

Muy pequeño

 

1

Medio

 

2

Grave

 

3

Muy grave

 

4


Por ejemplo el delito medioambiental en la empresa dedicada al sector metalmecánico que comentábamos antes, tendría un impacto muy grave (4).
3. Calcular la probabilidad de que la comisión del delito se materialice:

Probabilidad

Tramo

Improbable

1

Posible

2

Probable

3

Muy probable

4


La probabilidad de que el delito pudiese cometerse, de acuerdo con el sector de actividad de la empresa que utilizamos con ejemplo y sin tener en cuenta las medidas implantadas sería muy probable (4).
4. Calcular el riesgo, que sería la relación entre el impacto y la probabilidad de ocurrencia, de acuerdo con alguna regla matemática, por ejemplo 4*4=16. La conclusión es que el delito medioambiental tiene un riesgo que calificamos con 16.
5. Calcular el riesgo real o teórico, resultado de aplicar factores de reducción del riesgo, teniendo en cuenta las medidas implantadas en la empresa. El paso del riesgo inherente (sin tener en cuenta las medidas) al riesgo real es uno de los aspectos más críticos del Análisis de Riesgos.

Este proceso habría que seguirlo con todos y cada uno de los delitos que pueden generar responsabilidad penal para la empresa, obteniendo una matriz de riesgos penales. Aquellos delitos con mayor riesgo, serán objeto de mayores esfuerzos y seguimiento para evitar su materialización y las consecuencias penales de que de ellos se derivarían.

En conclusión, las políticas, procedimientos, normas, estructura organizativa, formación y sensibilización, gestión de evidencias, y en definitiva, todos los elementos de un Sistema de Gestión de Prevención de Delitos, deberían desarrollarse conforme a los riesgos penales previamente identificados.

  • 23 Octubre, 2015
  • Olga Martínez
  • Blog
  • 5 min
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